Hubo un día, hace tiempo, que mi corazón se fue y no le he vuelto a ver desde entonces, cuando se fue me di cuenta de que su marcha se debía a que ya estaba harto, pero el problema es que no sabía exactamente de que estaba harto.
Al poco tiempo, comprendí el por qué de todo, comprendí que mi corazón partió lejos de mi porque ya no aguantaba más, porque estaba ya demasiado dolido, tenía tantos golpes, tantos arañazos y demasiados rotos pegados con celo, que ni el celo aguanta ya ese peso.
Desde aquel día no he vuelto a ver a ese pequeño ser rojo con vida propia que se fue corriendo, huyendo de mi.
Ahora, ya no puedo sentir nada, me alegro de que mi corazón huyese, puede que en este momento este siendo feliz, que no haya vuelto a huir de nadie y que nadie más le haya hecho daño. Pero yo, le hecho de menos. No hecho de menos el sentirme mal ni el llorar por algo o alguien que no lo merecen, simplemente le hecho de menos a él. Con él, mis sonrisas, risas y gritos tenían algo más de sentido, con él me sentía un poco más viva, con él conocí el amor.
Y ahora que habló de ello, la única verdadera razón por la que mi corazón marchó fue por esa, el amor es horrible en el fondo, te enamoras, te sientes bien, pero eso solo dura unos instantes, le maltraté demasiado por no quererme a mi misma y por pensar que tampoco nadie me quería. Ahora se que sí, que alguien me quiere, no de la forma en la que se quiere a un cantante o actor ni tampoco de la forma en la que se quiere a un novio o marido, me quieren de la forma en la que yo quiero a mis amigos, y es que ellos son los que me quieren, y por eso quiero que vuelva, para que pueda ver y compartir conmigo la felicidad, el cariño y amor que siento con ellos, solo con ellos. Por ello, pido que vuelva.
Ellíe. (Eli)
VUELVE.
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